Parece mentira que en pleno siglo veintiuno sigan existiendo tantos prejuicios sobre la orientación sexual de los demás. Afortunadamente, videos como éste demuestran que con un poco más de concienciación las cosas pueden cambiar a mejor.
En este experimento se les pidió a 15 personas homofóbicas que abrazaran a un desconocido a sabiendas de que era homosexual. Obviamente, primero procedieron a presentarse.
Sus expresiones corporales delatan lo muy nerviosos y a disgusto que se encuentran bajo estas circunstancias, pero a medida que avanzan las conversaciones descubren que no son tan distintos a los homosexuales como creían. Y aunque algunos dudan sobre si proceder a ello, al final acaban abrazando a su interlocutor.
Esto demuestra que en ocasiones tememos a lo desconocido precisamente porque no nos es familiar y nos suena raro. Pero con un poco de esfuerzo por parte de todos conseguiremos derribar muros tan terribles como la homofobia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario